John Marcotte, diseñador de páginas de web de 38 años, quién lleva siete años de casado con dos hijos, propone para el año próximo ilegalizar el divorcio en California, EUA.
No tiene la típica faceta del cristiano fundamentalista norteamericano; tampoco pertenece a alguna institución cristiana reaccionaria cuyo objetivo siempre ha sido reforzar (no digo llevar, dado que en gran parte del territorio estadounidense prácticamente está presente...) el "reinado de dios en EUA", tales como la Asociación de Familias Americanas, la Liga Católica o la Organización Nacional por el Matrimonio. Lejos de cualquier intromisión legal (acostumbradas) del lobby cristiano, su propuesta por imponer legalmente aquello del "hasta que la muerte nos separe" está inspirada, dice, en el dictado que hizo posible la aprobación de la llamada "Proposición 8" que prohibe constitucionalmente el matrimonio entre personas del mismo sexo desde noviembre pasado en el mismo estado: proteger la santidad del matrimonio entre el hombre y la mujer.
“Ya que California ha decidido proteger el matrimonio tradicional, sería hipócrita por nuestra parte no sacrificar alguno de nuestros propios derechos para proteger el matrimonio tradicional incluso más”, ha dicho el señor Marcotte en referencia a la aprobación de la Proposición 8, quién se define a sí mismo como un "cristiano y activista político". En Noviembre del año pasado, asegura, había votado en contra de la misma medida elaborada por evangélicos, católicos y mormones, dado que él entendió en la misma un claro signo de discriminación en contra de las personas homosexuales al negarles su derecho a acceder a los beneficios legales que otorga el matrimonio civil. Sin embargo, después de haber entrado a la página de internet "protectmarriage.com" (elaborada por los cristianos favorables a la 8) se dió cuenta de que no había alusión alguna a los homosexuales, sino repetidas alusiones a la importancia de proteger el matrimonio y los hijos (la línea del cristianismo político militante: no somo homófobos, pero...). "Pensé que esos eran pensamientos muy nobles", apunta; entonces ¿por qué no protegerlo más? pensó de inmediato y de ahí nació su propuesta de recaudar 694 354 mil firmas antes del 22 de Marzo del año que viene para someter a referendúm en ese mismo tiempo la prohibición constitucional al divorcio.
Hay razones de sobra para poner en tela de duda la veracidad o falsedad de la campaña de Marcotte. La página de internet que elaboró en apoyo a su propuesta contiene varios mensajes irónicos en clara referencia a la "santidad" del matrimo tales como "Cada divorcio empieza con la muerte del matrimonio tradicional" y "el matrimonio no es un derecho, es una responsabilidad", lo cual hace dudar de que la campaña vaya en serio y sea más bien una parodia con respecto a lo ocurrido el año pasado cuando a los gays californianos se les privó de sus derechos civiles por decisión de "una mayoría" manipulada por los eternos enemigos de la separación Iglesia-Estado.
Pero también existen razones que hacen pensar que tal campaña no es falsa. El diseñador de páginas web aclaró a un medio tan importante como BBC Mundo que su propuesta va en serio y que el objetivo final de dicha campaña es imponer por la vía legal aquél dicho religioso que dice "hasta que la muerte nos separe". También por el hecho de que algunos grupos de cristianos radicales y con gran influencia en los EUA como la Asociación de Familias Americanas han quedado tan encantados con la propuesta de Marcotte de prohibición del divorcio, que le han dado gran eco dentro de la derecha cristiana.
Parodia o realidad, lo cierto es que esta campaña deja entrever la hipocresía de algunos sectores de cristianos radicales, como ocurre con Ron Prentice, quién fue el principal encargado de quitarles sus derechos civiles a los homosexuales al ser la principal cabecilla de la Proposición 8; él ha declarado que la prohibición del divorcio sería ‘poco práctica’ y que con su campaña sólo perseguían proteger la unión entre un hombre y una mujer... pesé a que ya he mencionado con anterioridad que su página web posee diversas alusiones a la defensa del matrimonio. !Pero que mejor manera de "proteger" la unión entre un hombre y una mujer que prohibiendo el divorcio! !El matrimonio gay ni siquiera amenazaba a los matrimonios heterosexuales! Es el pensamiento de John Marcotte, el cual ante las declaraciones de Prentice ha aseverado que "Mi propuesta apoya al matrimonio mucho más (que la Proposición 8). Si ellos quieren proteger al matrimonio, deben sacrificar el derecho al divorcio". Prentice ha dejado ver que su real intención era quitarles sus derechos civiles a los homosexuales y no "proteger" al matrimonio (¿de que lo iba a "proteger"? ¿de la equidad en derechos civiles para todos?).
Tiene razón sin duda alguna John Marcotte al apuntar que el divorcio "amenaza más" las uniones matrimoniales que cualquier otro asunto, y que si el discurso de la derecha cristiana es "coherente" con su "defensa al matrimonio" entonces apoyarán su propuesta.
De entrada, si la propuesta de Marcotte es real, entonces vendría corroborando lo que muchos de nosotros ya sabemos: el cristianismo es insaciable en la trituración de derechos y libertades civiles, nunca se conforman con seguir ellos mismos sus propios estamentos de nulificación de libertades, sino que desean que todo mundo les acompañe en su rechazo a la libertad y a disfrutar de la vida... y siempre dicha trituración en derechos ira hacia atrás, uno por uno, hasta que se alcance el sueño dorado de los tres grandes monoteísmos: un estado enteramente teocrático, monarquicó absoluto. En Polonia, país literalmente dominado por la jerarquía católica, un aspecto que resultaría tan cotidiano en otros países como la fertilización artificial está en peligro latente de ser sancionado con penas de cárcel gracias a que la Iglesia Católica polaca a través de la derecha llevó tan increíble penalización hacia las leyes civiles, porqué ve en la misma una clase de "aborto". En México con la llegada de la derecha (y por ende del clero mexicano) al poder se han dado pasos sorprendentemente progresivos hacia atrás; estado por estado han ido penalizando el aborto (en uno de ellos, Yucatán, fue al dos por uno: también prohibieron toda posibilidad de matrimonio gay), hacen injerencia para limitar la distribución de la pastilla del día siguiente, el sistema educativo está colocando "discretamente" el tema del creacionismo en los libros de biología y recientemente ha salido a relucir una propuesta que permitirá incumplir las legislaciones mexicanas por "objeción de conciencia" o de "creencias religiosas".
En California, una vez que las "gentes de fe" vieron que tuvieron rotundo éxito al retirarles a los homosexuales su garantía de ciudadanos completos ante la ley civil californiana, ahora se encaminan contra el que consideran "el otro enemigo de la familia": el divorcio civil. Si tienen éxito (que quién sabe, tratándose de EUA nunca se sabe) probablemente seguirán el ejemplo de Polonia o México: seguir hacia atrás mutilando más y más derechos. La religión siempre hace que todo marche hacia atrás.
Pero quizás eso no sea lo más llamativo del asunto con respecto a la presunta prohibición del divorcio civil en California, sino quiénes la está apoyando y por qué motivos. Uno esperaría ver, comúnmente, que la mayoría de los firmantes favorables a dicha propuesta sean integrantes de las cavernas cristianas más reaccionarias, y sí, precisamente muchos de los firmantes vienen de esos aires... pero muchos otros firman, desde mi percepción, para llevar a cabo lo del "ojo por ojo".
Comprendo perfectamente el malestar que muchas personas homosexuales (y sus familiares y amigos) sintieron cuando sus propios derechos civiles que no afectaban en nada a nadie fueron sometidos a juicio de una mayoría que aparte de todo estaba infestada con el virus del prejuicio movido eternamente por la religión (cuando supe que la creencia religiosa en California había triunfado por encima de la igualdad y libertad en matrimonio civil para todos, tenía tantas ganas de ir a la iglesia católica más cercana a pintarrajear "frases blasfemas" con aerosol), pero no creo que sea la manera más adecuada de combatir la grosera intromisión del integrismo religioso en la esfera personas y privada a través de la imposición legal... no creo que firmando la propuesta de Marcotte (los gays asi como sus amigos y familiares) estén haciendo justicia, solo están rebajándose al mismo bajo nivel del integrismo cristiano, le hacen su trabajo de retroceso social, no salen beneficiados y sí agrandan más la injusticia y el dominio religioso totalitario, que a la larga seguramente les afectará aún más.
No digo que haya que dejar las cosas así, no digo que debamos permanecer impacibles cuando las mayorías "por decreto divino" nos quitén nuestros derechos, como si fuera cosa de ellos decidir y entrometerse de la forma más grosera sobre nuestra vida personal; en efecto hay que hacer justicia, hay que darles batalla, hay que luchar por lo que nos corresponde, hay que pelear por la equidad e igualdad en derechos civiles y humanos para todos, hay que dejar en claro (explícita y legalmente) que en un estado democrático y secular los derechos humanos y civiles no se someten a votación, simplemente se otorgan, pero hacer justicia aplicando la ley del "ojo por ojo" no es la forma más adecuada. Por más encabronado que uno esté y desee hacer justicia, para acabar con la discriminación uno no debe aliarse con quién lo discriminó, y menos si estos son integristas religiosos que tiran hacia atrás; el fuego se apaga con agua o tierra, no con gasolina o más fuego.
Mañana la continuación de este post....
P. D: Parodia o no y a pesar de que el divorcio sí disuelve uniones matrimoniales (la mayoría de quiénes se divorcian, cabe recalcar, no lo hacen por gusto sino por razones y circunstancias de fuerza mayor), siempre estaré en contra de todo retroceso social, o sea estoy en contra de toda prohibición al matrimonio gay civil y en contra de toda prohibición al divorcio civil... y más si dichas prohibiciones se basan en dictados de entes inexistentes e imaginarios; y sí existiera ¿qué? ¿por qué habríamos de seguir sus dictados?
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios tipo "Troll de internet" serán eliminados.