Por fin acabaron las elecciones. No fue la gran cosa, afortunadamente.
La buena noticia es que el PAN, partido de extrema derecha y muy afiliado a la iglesia católica, perdió muchísimo en estas elecciones a alcaldes, diputados y gobernadores. Por ello podemos estar seguros de que por lo menos en un período de tres años las cosas no se pondrán más peor de lo que están ahora.
La mala, y es la misma de siempre, es que el PRI volvió a ser mayoría, y los partidos innovadores que sí se vieron comprometidos con México o ganaron muy pocos puestos, prácticamente marginales, o están en riesgo de desaparecer. Vaya sorpresa: cuando se hartan del PAN van con el PRI, cuando se hartan del PRI van con el PAN y así sucesivamente... nunca sopesan otras opciones más alla de las dos. A pesar de que él PRI es un partido completamente impredescible en su ideología (un día es de derecha y otro de izquierda, otro es tibio...), por lo menos da gusto que (y repito, por lo menos) es un partido abierto a la negociación.
Y bueno, como dicen por ahí: Aquí se rompió una taza, y cada quién para su casa.
Los Torquemadas de Junio ya están disponibles; vayan a la imagen de "Torquemada" de este blog o pinchen aquí para que puedan votar.
Bueno, al menos si los derechistas no ganaron, algo es algo.
ResponderEliminarAqui pasa algo igual, unas veces gobierna el PSOE que podiamos llamar de centro-izquierda (mas bien centro, en mi opinion) y otras el PP que se denominan centro-derecha, pero que para mi son ultraderechistas puros.
Las otras opciones son minoritarias y la situación no tiene vistas a cambiar en unos años. Ojalá y surjan partidos que puedan ser visagra, como en Alemania, pero aún aqui no se dan, tan solo los nacionalistas.
Saludos y perdon por el rollo.
No pidas disculpas, a veces es mejor extenderse un poco :-)
ResponderEliminarPues... entonces que así sea; que surjan partidos que de verdad sean innovadores en izquierdismo, nos hacen mucha falta para seguir progresando.
Saludos!