8/30/2009

Monstruos

He percibido que es la sociedad misma la que crea a sus propios monstruos, a sus propios verdugos. Cada persona, cada grupo y cada institución en su conjunto le da vida a sus propios agresores...

Puedo enumerar varios ejemplos, varios casos en los que los propios victimarios a menudo terminan creando a sus propios verdugos, a sus propios agresores; pero solo me afocaré a estos casos.

El del ex-sacerdote católico Alberto Cutié; desconozco bien a bien como era el carácter de dicho clérigo, pero el hecho de que perteneciera a la Iglesia Católica lo hacía prácticamente partícipe de la doctrina ampliamente mutiladora sobre la sexualidad que predica la misma: que la vida sexual es intrínsecamente pecaminosa, perversa, culposa y vergonzosa. ¿Y que pasó? los propios dogmas antisexuales inquisidores que el mismo predicaba (¿por mandato de la Iglesia Católica?) para enjuiciar a otros terminaron golpeándolo a él mismo... su sacerdocio terminó cuando se le descubrió en un romance con una mujer, amén de que también recibió duras críticas, desde el Vaticano, desde sus clérigos compañeros, y hasta de la misma comunidad católica. Creo un monstruo, el de la "fobia sexual", que terminó atacándolo a él.

Mark Sanford, gobernador del estado de Carolina del Sur en EUA, perteciente al Partido Republicano, el cual como ya he mencionado en otras ocasiones es el partido político de la derecha cristiana. Como se imaginarán dicho partido se basa en los "valores cristianos" como el único "referente ético" a seguir, son incuestionables y, por demás, ofrecen visiones y soluciones extremistas para todas y cada una de las situaciones que se presenten en la vida.. por supuesto, visiones y soluciones extremistas basadas en los dogmas cristianos. Los republicanos siguen esa línea extremista para todo: "la homosexualidad es una abominación, punto", "la investigación con células madre atenta contra la vida, punto", "la biblia es el único referente ético a seguir, punto". Pero ese monstruo llamado "extremismo" le ha salido caro al señor Sanford... como la infidelidad es un asunto tratado de una forma maligna por la visión cristiana con visiones en negro extremistas, a Mark Sanford se le ha volcado en su contra el monstruo que él y su partido crearon con tanto afán: visiones moralistas extremistas. Otra cosa sería si hubieran cultivado ética humanística: su infidelidad desde luego no recibiría aprobación inicial, pero tampoco recibiría el negro extremismo de la condena, recibiría el análisis.

Por último el caótico Silvio Berlusconi, primer ministro de Italia. La Iglesia Católica lo forjo en sus santos dogmas de derecha radical, para ser su fiel aliado en la imposición del "reino de dios" en la tierra. Berlusconi libró exitosas batallas, aplicando la agenda católica en casi toda Italia, fue un excelente caballo de batalla del Vaticano. Sin embargo la relación entre estos dos entes no duraría por mucho tiempo, Il Cavaliere chocó contra el monstruo creado por la Iglesia Católica y que él mismo reforzó durante su mandato; se lastimó con su propia arma que usó en no más de una ocasión para perseguir a mujeres feministas y homosexuales... el predicaba el monstruo "fobia al cuerpo" y terminó engulléndolo: recibió duras críticas por mantener relaciones con varias mujeres a la vez. Pero esta vez la Iglesia Católica recibió una cucharada de su propio chocolate, ella creó al monstruo Berlusconi que terminó por atacarla; la Iglesia Católica le enseñó a dar una respuesta caótica ante las críticas (como es el estilo de la "Puta de Babilonia"), y como la Iglesia Católica cometió el grandísimo error de criticar a uno de sus más grandes aliados, en este caso al monstruo Berlusconi pues... ahora lo está pagando caro con Il Cavaliere: su hermano sacó algunos "trapitos al sol" de un obispo que aparentemente no solo lleva una doble vida manteniendo un romance con otro hombre, sino que aparentemente está acosando a la esposa de ese hombre homosexual reprimido para que lo deje.

Si, asi es; también los homosexuales reprimidos crean a sus propios verdugos homófobos ya que a menudo suelen ser más homófobos que un heterosexual antigay; cada vez que un hombre gay reprimido (y heterosexual antigay) profiere un insulto, agresión o denigración hacia otro hombre presumiblemente homosexual está donando un homófobo más al ambiente social, el cual se volverá más hostil contra todos los gays incluidos los reprimidos, los gays reprimidos se reprimirán todavía más y tendrá como resultado estos episodios embarazosos de "dobles vidas", como la que aparentemente tiene ese obispo. En este caso el monstruo se llama "homofobia", engendrado por heteros y gays reprimidos; sin embargo cuando es engendrado por estos últimos el resultado es que dicho monstruo a menudo suele volcarse contra tí.

Si, existen los monstruos; la sociedad los crea, y después la devoran...

4 comentarios:

  1. Ciertamente, es la sociedad la que estigmatiza a las personas, pero por sus própios miedos.

    De Berlusconi, te puedo recomendar que leas un articulo de El Pais, que le dedicó mi admirado José Saramago, que se llama "La cosa Berlusconi", es genial. Tambien puedes leerlo directamente en el blog de Saramago.

    Un saludo y buena semana.

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  2. Así es, Quique. Ejemplos como los que has dado hay tantísimos, sin embargo, los monstruos que han creado siguen lamentablemente en pié.
    Puedo llegar a "entender" (pero nunca a "aceptar") los monstruos creados en contra de los gays por los hétero; pero cuando son los mismos gays (reprimidos o no) los que cultivan la homofobia, mi indignación se torna absoluta!!!

    Un gran abrazo, y saluditos para mi queridísimo Jose que siempre llega antes que yo! jajaja

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  3. José:

    Que tal!

    Ya he leído la opinión de José Saramago respecto a Berlusconi; más de acuerdo no puedo estar con sus palabras... lo peor del caso es que los italianos ni se dignan a criticarle nada, salvo los diarios de izquierda italianos y personas extranjeras que no son italianos y somos de otros países. Pero bueno... ojalá que un día Italia salga de su letargo.

    Un abrazo!

    Beto:

    Es verdad. De hecho, y vergonzosa o lamentablemente, la peor homofobia es la que predica el homosexual reprimido, es muy agresiva y obsesiva. La mayoría de los heterosexuales que son homófobos no suelen ser tan caóticos al expresar sus sentimientos homófobos. Probablemente esto sea así porque el homosexual reprimido manifiesta dos odios por partida: contra el resto de los homosexuales y contra su propia homosexualidad, contra sí mismo. Los prejuicios deshumanizan, y cuando los absorbe el discriminado es terrible.

    Un abrazo!

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  4. Bien, la palabra Ateo quiere decir "En contra de Dios". Entonces ¿que se puede esperar de un gay ateo? si el homosexualisno y lesbianismo son demonios posesionando cuerpos de hombres o mujeres. Hasta satanos pelea por sus causas y como no lo hara un gay.

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